Ejemplo
Efectos del volcán Mauna Loa en el suelo
Equipo
Ariadna Ortega
Carlos García
Localización
Razones para elegir este caso
Antes
En esta situación, el terreno es totalmente inhabitable. El magma se encuentra todavía caliente, lo que es peligroso para los seres humanos e impide la libre circulación por el terreno.
Además, el efecto del magma puede generar incendios que destruyan los cultivos y la vegetación de la zona.
Después
Transcurridos 10 años de la erupción será posible volver a utilizar parte de las tierras afectadas para cultivo. Gracias a los componentes producidos tanto por el magma como por las cenizas, este suelo será especialmente fértil, lo que permitirá el desarrollo de cultivos como café, papaya e higos, entre otros.
Para que esto pueda producirse de manera exitosa, es necesario que se produzcan una serie de condiciones, tales como la estrecha colaboración con expertos científicos que asesoren sobre la situación del suelo, la acción de las autoridades para la protección activa de las zonas afectadas y el apoyo del gobierno para potenciar la agricultura.
Trabajo realizado
- Planteamiento del problema
- Obtención de fotografías de la zona estudiada
- Lectura de bibliografía sobre los efectos de las erupciones volcánicas sobre el suelo
- Utilización de la técnica de backcasting para predecir los pasos necesarios para llegar al futuro deseado: lluvia de ideas, análisis y creación de un plan de acción
- Debate en grupo
- Redacción de la entrada de wiki
Aprendizaje obtenido
- Cómo utilizar una wiki dentro de WordPress.
- Cómo utilizar herramientas de previsión del futuro, en este caso el backcasting.
- Cómo realizar una lluvia de ideas y elaborar un plan de acción en base a las mismas para conseguir un objetivo.
- Cómo utilizar el arte digital como herramienta para la previsión de futuros posibles.
- Cómo plantear distintos futuros posibles e identificar las causas que puedan generar la ocurrencia de unos o de otros.
- Los efectos de las erupciones volcánicas sobre el suelo: las erupciones producen un suelo extremadamente fértil gracias a las altas cantidades de magnesio y potasio contenidas en las rocas volcánicas y las cenizas. Estos componentes actúan como fertilizantes naturales que favorecen las cosechas en las zonas afectadas por erupciones volcánicas.
